¿Qué tener en cuenta y cómo protegerse de un ciberataque?
Los ciberatacantes están introduciendo nuevas estafas para sacar provecho de la preferencia de los compradores por plazos de entrega más rápidos. La mayoría de estos intentos de estafa adoptan la forma de phishing a través de mensajes de texto. Estas comunicaciones suelen informar al destinatario de un retraso en el envío o de una entrega inminente, pidiéndole que haga clic en un enlace para confirmar su nombre, dirección de envío y otros datos personales. Una vez que se hace clic en el enlace malicioso, los ciberatacantes pueden capturar la información sensible de un usuario o incluso utilizar ese clic en el enlace para leer la caché de un dispositivo móvil y acceder a un conjunto más amplio de datos, como los nombres de usuario y las contraseñas de las aplicaciones y sitios web que frecuenta.
Aquí están algunas de las tácticas habituales de los ciberatacantes para aprovecharse de los usuarios:
- Sitios web falsos: cada año, durante la temporada navideña, surgen sitios web de compras falsos, diseñados para atraer a los consumidores con precios bajos y ofertas irresistibles para que compren productos que no existen. Los ciberdelincuentes también utilizan el typosquatting -un ciberataque que se basa en que los usuarios teclean mal las URL- para crear sitios falsos y engañar a los compradores. Antes de realizar una compra en línea, especialmente en un sitio en el que no haya comprado antes, investigue para asegurarse de que la empresa es legítima.
- Programas maliciosos en Internet: los ciberdelincuentes suelen colocar anuncios o enlaces falsos en sitios web de confianza -generalmente con artículos gratuitos o rebajados- con el fin de desviar a los compradores del sitio seguro por el que están navegando. No es de extrañar que el volumen de programas maliciosos basados en la Web que observamos durante las fiestas sea, por lo general, mayor de lo habitual.
- Estafas en redes sociales: los ciberdelincuentes suelen hacer lo mismo en las redes sociales, publicando anuncios que promocionan artículos inexistentes o falsificados. Otros pueden ofrecer vales, tarjetas regalo, productos gratuitos y concursos para incitar a los usuarios a hacer clic en enlaces que contienen malware.